El pasado 18 de mayo tuvo lugar la reunión del Patronato del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, organismo gestor bajo la presidencia de Manuel Pizarro y constituido por los alcaldes con territorios en el espacio protegido, junto a representantes ecologistas y Guardia Civil de Montaña. El objetivo fue aprobar los 1,8 millones de presupuesto con que consta el Parque para gestionar sus 16.000 hectáreas. Se trata de una cifra 50% inferior a de otros años si bien, acorde con la línea general que han adoptado nuestros políticos en los últimos meses. Esperemos, pero tememos que sea así, que dicha disminución no afecte a la calidad ecológica del Parque. Tristemente no se abordó la casi más que necesaria, urgente, ampliación del espacio, acosado no solo por los 650.000 turistas que los visitan anualmente, sino por proyectos invernales y urbanísticos que pueden dañar irrecuperablemente su entorno. Desde el años 2002 se baraja la posibilidad de realizar una ampliación que lo deje entre 48.000 y 63.000 hectáreas, proyecto por el momento postergado por......nadie lo sabe.
